PANADERÍA

lunes, 2 de noviembre de 2015

GALLETAS DE CANELA.

¡Vale! lo admito me encantan las galletas y si además llevan canela ya que se preparen porque sacan lo peor que hay en mí, podría decir como mi abuela que dice de todas las cosas crujientes que no es que le gusten sino que le agrada como crujen en sus dientes, anda ya abuela y deja de morderme la mano que  solo te iba a quitar una papa frita, por cierto un día os hablaré de ella,¡ES LO MÁS! y tengo demasiada debilidad por esa personita .Antes de que empiece a contarles batallitas de mi abuela, vamos con la receta que es ideal para un día nublado con un café o con una buena infusión y tapado hasta el cuello con una manta de esas aterciopeladas.
INGREDIENTES: 
200g de mantequilla
100g de azúcar blanco.
60g de azúcar moreno de caña.
100g de huevo.
250g de harina de uso común.
8g de impulsor tipo Royal.
3g de sal.
2 c.c de canela molida
PREPARACIÓN:
Lo primero es tener todos los ingredientes a temperatura ambiente, ya que luego podemos tener problemas de que la mezcla se nos corte por diferencias de temperatura.
 Ponemos la mantequilla pomada (temperatura ambiente) en un bol junto con los azúcares y mezclamos con varillas unos 10 minutos, que se te hará una hora por cierto.... Luego bate los huevos para evitar los hilos de clara y ve vertiendo a hilo en la mantequilla con el azúcar y mezclando con varillas poco a poco, mientras la grasa va aceptando el huevo, vete parando si hace falta y hazlo a intervalos. Una vez están todos integrados, mezcla el harina, la sal ,el impulsor, la canela  y tamízala directamente sobre la mezcla de huevos y mantequilla y con una cuchara de palo vete integrando, ya que con las varillas te será bastante difícil, aquí no hace falta que amases ni nada de esto, simplemente cuando esté la la harina  integrada, para de mezclar
.Separa la masa en dos y estira ambas partes cada una sobre un papel de horno con otro papel de horno encima, ¡A MODO  SÁNDWICH, y con un rodillo estira las dos masas hasta tener una lámina d 3-4 milímetros y mete a la nevera durante 45 minutos para que solidifique.
Con un molde con el que quieras que salgan tus galletas , vete cortando y colocando en una bandeja, cubierta con papel de horno, dejando una separación de 3 centímetros para que no se peguen unas con otros y el calor pueda pasar bien por todos lados. Llena la bandeja y mete las galletas en el horno precalentado y hornea unos 12 minutos a 180 grados; si las galletas son pequeñitas tipo oreo, con tan solo 8 te será suficiente.
Doradas las galletas retira y coloca sobre una rejilla para que el aire pase por arriba y por abajo de la cookie y nos queden bien crujientes, y la humedad residual no nos la ablanden.
Una vez fría y si te queda alguna guárdalas en un bote hermético.


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